GM ha anunciado la suspensión de la producción del taxi autónomo Cruise Origin, para concentrar sus recursos en la adaptación de vehículos existentes, como el Chevrolet Bolt EV. El diseño único del Cruise Origin, sin volante ni pedales, ha generado incertidumbre regulatoria, aumentando los altos costos de producción (decenas de miles de dólares por unidad) y la reticencia a su aprobación. A pesar de estar cerca de la aprobación regulatoria en septiembre pasado, una posterior prohibición en California y los consiguientes conflictos han supuesto pérdidas multimillonarias para la empresa. La CEO, Mary Barra...